
"Enseguida vuelvo..." quizás...
o no, porque de vez en cuando , una se encuentra tan bien: perdida en su propia soledad, sabiendo que no está sola.
Sumergida en la propia vida interior, imaginando, soñando, pensando o solamente no pensando: dejando vagar la mente libremente...
Abandonada a la corriente, en silencio, protegida ante el mundo, el problema oculto... es un minuto, un segundo, un susurro de paz.
Lo mismo que sientes durante el calor de un abrazo, durante el tiempo de un gemido, pero en oscuridad escondida en el segundo cuadrante, azul, vulnerable...
mostrando solo una parte en este rompecabezas implacable y tú; frágil.
A veces te observo en la distancia, frágil, etérea, impenetrable.